jueves, 27 de septiembre de 2012

Instruye a tus hijos


Instruye al niño en su camino, y aún cuando fuere viejo no se apartará de el…. ! Proverbios 22:6

Ahora, deseas que tu (s) hijo (s) sean instruidos en su camino?. Pues lo primero es poder vivir en ese camino, y esto no implica una obligación, es algo que debe ser voluntario, pero al mismo tiempo muy natural, así que si tienes hijos pequeños, comienza por cambiar tu manera de vivir en casa.


Educad al niño de hoy y no tendréis que castigar al hombre del mañana. Esta frase que se le adjudica primero a Pitágoras, después a Simón Bolívar y después, tantos otros se la han apropiado como suya. pero en el momento en que fue pronunciada seguramente y sin importar la edad histórica en que fue dicha, trajo una reflexión profunda a aquellos que la escucharon

Hoy esta idea no ha pasado de moda, ni está tirada en el cesto de los papeles, pues su vigencia es tan actual como en el tiempo en que fue pronunciada.

La educación del niño hoy es primordial, dado que como se ha dicho más de una vez, trabajar en el crecimiento educativo de la niñez, es trabajar con el material humano que ha de guiar al mundo en los tiempos futuros.

"El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; mas el que lo ama, desde temprano lo corrige."    —Proverbios 13,24

"Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él."   —Proverbios 22.6

"Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor."  —Efesios 6.4

Oración
Padre Celestial, nosotros clamamos a ti por nuestros hijos. Deseamos instruirlos en el camino correcto, utilizando las oportunidades que se nos presentan a diario. Ayúdanos a hallar el camino correcto para nuestra propia vida. Guárdanos de ser extremistas, pero guíanos en la senda de la justicia y la rectitud. Oro por todos los padres que se sienten abrumados por las enseñanzas que deben dar a sus hijos. Acércate a ellos y anímalos mientras buscan transitar por el camino correcto. Guíalos en el camino estrecho y angosto por amor a tu descendencia piadosa y por amor a tu nombre. En el nombre del Señor Jesucristo, amén.



lunes, 17 de septiembre de 2012

Septiembre mes de la Biblia en Uruguay


¿Por qué celebramos en Septiembre el Mes de la Biblia?

Porque en un día 26 de Septiembre de 1569, se termina de imprimir totalmente la Biblia en español llamada “Biblia del Oso”. Fue traducida por Casiodoro de Reina. En esa oportunidad salieron 260 ejemplares en Basilea, Suiza. De ese acontecimiento hace ya 443 años.

La primera publicación fue denominada la Biblia del Oso por el emblema que aparecía en su portada: un oso de pie junto a un árbol, tratando de alcanzar una colmena para beber su miel, logotipo del impresor bávaro Mattias Apiarius. Esta ilustración se utilizó dado que se quería evitar el uso de íconos religiosos, porque en aquella época estaba prohibida cualquier traducción a lenguas vulgares de las Sagradas Escrituras.

La traducción estuvo a cargo del monje jerónimo y humanista sevillano Casiodoro Reina, y la revisión fue llevada a cabo por su compañero Cipriano de Valera.

En el trabajo realizado por Reina es importante destacar su valor literario, principalmente por dos motivos: primero, por la calidad de su lengua, que la convierte en un monumento de la literatura iberoamericana; y segundo, por su extrema fidelidad al original, ya que recoge el tono primordial de las tradiciones hebreas.

Por su parte, Valera dedicó 20 años de su vida a la revisión del trabajo de su coterráneo y compañero de claustro. Como resultado, la referida versión salió publicada en 1602 y fue llamada la Biblia del Cántaro, porque en la portada podía verse estampada la imagen de dos hombres: uno que está plantando un árbol, mientras el otro lo riega con agua que sale de un cántaro.

En el mes de la Biblia, nuestra motivación principal es contribuir para que la lectura de La Biblia llegue a muchas personas. La realidad de La Biblia y el evangelio también se demuestra en las vidas cambiadas de los mismos creyentes.

Ella ha sido inspiración y posibilitado que muchísimas personas cambiaran sus vidas, para bien de ellos mismos, sus familias, sus estudios, su trabajo, su futuro, su salud, su prosperidad, la paz interior y la esperanza de vida eterna.

Consigue una Biblia, Abre tu Biblia, tal vez olvidada, y descubre el maravilloso mundo que Dios guarda allí, para ti, deja que Dios en su Palabra te hable y te encuentre. Es Dios quien te habla, descúbrelo, contémplalo, por ti mismo.

Concurre a una Iglesia donde se predique y enseñe de ella.

La Palabra de Dios es el camino para encontrarnos con Jesús y cambiar la vida.

Encontrarse con la Palabra de Dios significa descubrir la persona de Jesús y su mensaje. La mejor manera de abrir nuestro corazón a su presencia es leer, orar y practicar su Palabra.

Al concluir el sermón de la montaña, eje central de las enseñanzas de Jesús en el evangelio de Mateo, El nos dice:

"El que escucha mi Palabra y la practica es como un hombre inteligente que edificó su casa sobre la roca. Cayó la lluvia a torrente, sopló el viento huracanado contra la casa, pero la casa no se derrumbó porque tenía los cimientos sobre la roca."
Mt. 7, 24-25

domingo, 16 de septiembre de 2012

Por sus frutos los conoceréis


Usted puede conocer un árbol frutal por los frutos que produce. Muy fácil, ¿verdad? Es como dice la Biblia en Mateo 7.16: Por los frutos los conoceréis. De la misma manera, usted puede conocer el corazón de una persona por las obras que hace. Esto no es tan fácil, pero se aplica en la misma forma al corazón humano como al árbol frutal.

No debemos esconder esos frutos. En Mateo 5.16, Jesús dijo: “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.” Todo el mundo espera ver buenas obras en la vida de los cristianos. Todos también juzgan la falta de fe en otros por sus obras malas.

Y así los cristianos pueden juzgar a los hombres de la misma manera. Hechos malos quiere decir un corazón malo, no importa lo que diga con su boca. ¿Por qué? Porque el mismo Jesús enseñó esta simple verdad, tomando ejemplo de la naturaleza: “Por sus frutos los conoceréis”.
Santiago Landis

domingo, 9 de septiembre de 2012

El justo por fé vivirá


Habacuc 2: 4 dice: «Mas el justo por su fe vivirá». Recordemos que esta importante declaración se cita varias veces en el Nuevo Testamento.
La verdad que declara este versículo es que solo hay dos posibles actitudes hacia la vida en este mundo: de fe y de incredulidad. O conducimos nuestra vida con fe en Dios, y las conclusiones que surgen naturalmente de esa actitud, o nuestro enfoque estará basado en un rechazo de Dios y las negaciones que se derivan de esa decisión. Podemos «retraernos» del camino de la fe en Dios, o por el contrario podemos vivir por fe en Dios. Los mismos términos utilizados sugieren una correspondencia con los dos caminos posibles. Lo que el hombre cree determina la conducta de su vida. El justo, el recto, vivirá por la fe, o dicho de otra manera, el hombre que vive por fe, es un hombre justo.

El crecimiento espiritual es resultado de confiar en Jesucristo. "El justo vivirá por fe" (Gálatas 3:11). Una vida de fe que te capacitará para confiar en Dios progresivamente en cada detalle de tu vida y a practicar lo siguiente:

C. Conversa con Dios en oración diariamente (Juan 15:7).
R. Recurre a la Biblia, estudiándola diariamente (Hechos 17:11).Empieza con San Juan.
I. Insiste en confiar a Dios cada aspecto de tu vida (1a Pedro 5:7).
S. Sé lleno del Espíritu de Cristo. Permítele vivir su vida en tí (Gálatas 5:16-17; Hechos 1:8).
T. Testifica a otros de Cristo verbalmente y con Tu vida (Mateo 4:19, Juan 15:8).
O. Obedece a Dios momento a momento (Juan 14:21).

lunes, 3 de septiembre de 2012

Controla tus pensamientos


Tenemos que cuidar lo que escuchamos,lo que miramos,y lo que hablamos.
Ya que lo entra por ojos y oídos va a nuestro corazón y de lo que se llene nuestro corazón eso hablaremos..
Por eso débenos llenarnos de la palabra de Dios y que entre y se arraigue en nuestro corazón.
Ya que es vida...
El apóstol Pablo nos enseña que aún nuestros pensamientos deben ser sometidos a la voluntad de Dios, y que debemos procurar pensar en cosas buenas, positivas y productivas. ¿Por qué diría esto? Estoy convencido que el Espíritu Santo dirigió al apóstol a enseñarnos un nuevo lenguaje. El Espíritu quería que su iglesia aprendiera Su lenguaje, el lenguaje del Espíritu. ¿Y cuál es este lenguaje? “Es pensar positivamente reconociendo a Dios como quien quiere que seamos felices, prósperos y productivos” (Leer Juan 10:10, “Yo he venido para que todos ustedes tengan vida, y para que la tengan en abundancia”).Lo primero que debemos decir es que pensamientos y palabras están conectados. Leamos lo que dice la Biblia al respecto: “El que es bueno lo es en su corazón y habla lo que tiene allí, de igual manera el malo lo es en su corazón y habla de lo que tiene allí; porque las palabras revelan lo que hay en el corazón” (Lucas 6:45). El término corazón se debe entender aquí como “mente, ó lugar donde radican los pensamientos”. Así entonces, una buena traducción quedaría así: “Las palabras que salen de tu boca revelan lo que hay en tus pensamientos”. De ahí la importancia de llenar nuestra mente con pensamientos positivos, productivos y felices (Filipenses 4:8)